Cuando pensamos en la admiración solemos pensar en alguien que nos provoca inspiración, un sentimiento positivo que se genera al reconocer la atracción por algo que una persona hace de un modo particular de hacerlo. Así, podemos decir que admiramos la fortaleza o vitalidad de alguien, su inteligencia, su compromiso. También, asociamos la admiración a formas de reconocimiento y a la inspiración que generan determinadas personas que embelesan, que cautivan nuestros sentidos. Para la columna de esta semana quiero explorar filosóficamente a la admiración.
