Todos las consecuencias que la política prohibicionista
sobre el uso de drogas ha generado
se concentran en el monstruoso dispositivo narco
si los consumidores quieren acceder a drogas ilegales
como ocurre históricamente
desafiando las diferentes formas de represión
el tráfico delictivo estará ahí para venderlas
sin regulación de calidad y con la correspondiente criminalización de los usuarios
el negocio se extiende de manera clandestina
la droga de mala calidad circula
el dinero narco compra complicidades policiales
monta circuitos legales para lavar capitales
captura voluntades políticas
para asegurarse impunidad y utiliza la violencia
para conquistar territorios
Rosario es el ejemplo de un viaje de ida
que el prohibicionismo alienta y cuya salida no es por el laberinto de la penalización
sino por arriba
sacar el manejo de la droga de las calles
de la pobreza y poner al Estado a regular
y controlar la producción y circulación de todas las drogas
que se consumen como lo hace con aquellas que producen
laboratorios privados el paradigma de la prohibición
ha fracasado estrepitosamente a nivel mundial
las drogas no dejan de consumirse
los narcos no dejan de hacer un gran negocio criminal
las fuerzas de seguridad no pueden ganar la guerra
y las consecuencias de este absurdo y letal juego la pagan
principalmente los sectores marginados que buscan sobrevivir
convirtiéndose en dealers jóvenes que ingresan al mundo narco
y salen muertos antes de ser adultos
mientras tanto el debate sobre la drogas
se reduce a pedir mas represión mas cárceles
mas muertes una escalada punitivista
que en su estrepitoso fracaso
arrastra generaciones de vidas condenadas
a matar y morir
sociedades rehenes de los discursos mas violentos
ciudadanos atemorizados por el fantasma de la inseguridad
medios incapaces de revisar a fondo un modelo impuesto hace décadas
la prohibición envenena criminaliza a millones de personas
beneficia al narcotráfico intoxica las fuerzas de seguridad
genera desinformación alimenta el miedo y obtura la posibilidad de crear políticas alternativas Rosario es la prueba y el error es seguir la misma senda y profundizar la violencia
El agua vale mas que el oro
Una efeméride que no saldrá en los noticieros, que no ocupara espacio en la prensa,